600 personas en la puerta del cine, realmente la gente CORRÍA para ver esta película, parecía que se habían metido con anterioridad en el ambiente de pánico que se vivió durante todo el film. Y es que la impaciencia de la muchedumbre tubo su recompensa, la película estuvo verdaderamente bien, Spielberg (se terminaron tantos marcianitos pacíficos) refleja asombrosamente bien el pánico y la estupidez de la humanidad en momentos difíciles, escenas como la del Ferry o la “toma de posesión” son esas en las que ves lo que realmente vale la película, la gente, en el cine (me incluyo) se revolvía de malestar al ver esas imágenes, la desesperación puede llegar a ser contagiosa aunque tu estés tranquilamente sentado en una butaca. Me encantaron los marcianitos, una mezcla entre anfibio e insecto con unos ojos inexpresivos, que supongo que la gente mas o menos se los imaginaria así, yo esperaba algo mas “ pulposo” aunque al parecer me equivoque ya que los de Spielberg tenían solo una pata
Los mejores Tom Cruise (Ray Ferrier) y Tim Robbins (Ogilvy) que reflejan la serenidad y la sangre fría que cualquiera de nosotros puede llegar a alcanzar cuando se trata de nuestros hijos y la desesperación y la locura, respectivamente. Dakota Fanning (Rachel) es la viva inocencia que poco a poco se va diluyendo aun que nunca llaga a esfumarse. Justin Chatwin (Robbie) el típico adolescente rebelde enfadado con el mundo que a la vez esta mas enfadado con aquellos que intentan destruirlo.
La vocecilla en off que nos introduce en la historia y nos la remata es un detalle que marcara la película, pero que para muchos (como ya escuche a la salida del cine) será un plagio mas que barato de el comienzo de Star wars.
Yo estaría dispuesta a ir todos los días la cine si todas las películas fuesen las mitad de emocionantes que esta, de verdad mi corazón estuvo a mil durante gran parte del film.
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